viernes, 20 de abril de 2007

Tsunamika

Saludos a todos


Estoy de vuelta. Después de vacaciones, viaje de trabajo y semana de exámenes por fin puedo reportarme por estos virtuales lares.
Ya les platicaré un poco sobre el rodaje del nuevo cortometraje de Pepe Caudillo en el que participé -y sigo participando; también haremos un recorrido por algunos sucesos conmovedores que me han marcado en las últimas semanas (seguro no hablaré de Cho, ni de la despenalización del aborto, a menos, claro, que por acá alguien demande mi punto de vista) como pueden ser el aniversario de los 100 objetos de Greenaway, el hermoso gol de Lio Messi (y conste que soy madridista a muerte) o el concierto de Fred Frith en México.
Por lo pronto, les comento que el miércoles pasado en Arte A.C., en la ciudad de Monterrey, se inauguró la exposición NEXT, Arte Efímero, a la cual fui invitado a participar. Mi propuesta fue una instalación efímera llamada Tsunamika; aquí les presento todo el contexto histórico y el discurso conceptual de la instalación, espero que les guste:
Tsunamika //Instalación Efímera//
Introducción
El 26 de diciembre de 2004 pudimos escuchar, leer y mirar los alcances del tsunami, un terrible desastre natural que violentamente devastó extensas zonas del sudeste asiático, incluidos países como Indonesia, India, Tailandia y Bangladesh por citar algunos. Particularmente en la India, el tsunami provocó más de 10,000 muertes y dejó a más de 14,000 hindúes, la mayoría familias de pescadores, replegados en centros de ayuda, con un pasado borrado de golpe y un futuro en extremo incierto. Miles de personas perdieron súbitamente a seres queridos y amigos; dejaron en el agua todas sus pertenencias, toda su historia.
Auroville es un poblado ubicado al sur de la India; durante los últimos 36 años, personas de todo el mundo han llegado a este lugar con el propósito de construir un nuevo sitio para vivir, en el que el respeto y la paz sean las leyes principales, en beneficio de todos los que allí habitan.
Es precisamente en Auroville, inmediatamente después del tsunami, en donde nace el proyecto Tsunamika: aproximadamente 500 mujeres pescadoras de 6 pueblos son invitadas a una terapia ocupacional, con el fin de ayudarlas a superar las terribles pérdidas humanas y materiales que recién habían sufrido. Esta terapia ocupacional es un proyecto de Upasana Design Studio, un grupo de personas que se agrupan desde 1997 y que tienen como objetivo involucrar a los habitantes de Auroville en varios proyectos creativos relacionados con la manufactura de artesanías. El proyecto Tsunamika consiste en un entrenamiento para aprender a fabricar unas pequeñas muñecas hechas a mano con saldos de materiales desechados por otros proyectos de Upasana. Todas las muñecas hechas por las pescadoras son compradas a granel por la misma gente de Upasana y son regaladas incondicionalmente alrededor del mundo para expandir el mensaje de Tsunamika.
¿Qué es Tsunamika?
Tsunamika es un símbolo; un símbolo viviente de una historia trágica que encuentra una luz.
Como su nombre lo indica, Tsunamika es la hija del tsunami; el tsunami que cambió la vida de millones de personas.
Tsunamika es la memoria del tsunami.
Ella ha sido hecha a mano por mujeres,
mujeres que viven del océano,
mujeres que cambiaron su vida para siempre después del tsunami,
mujeres que hoy están explorando nuevas formas de vida,
mujeres que se están revalorando a sí mismas.
Tsunamika es la expresión del fuego creativo,
a través de Tsunamika ellas han entrado a un nuevo y amplio mundo.
Tsunamika ha sido hecha con trozos de materiales sobrantes,
desechados en otros trabajos,
Tsunamika está hecha de eso que algunos llaman basura,
pero en la naturaleza nada puede ser llamado basura,
todo en esta vida tiene un rol creativo,
todo en esta vida puede estar vivo y ser hermoso,
como Tsunamika.
Tsunamika es un mensaje vivo,
un mensaje de una nueva forma de vivir,
en donde la VIDA es respetada,
es un mensaje de la unidad de la vida,
en donde el amor a los semejantes tiene lugar,
un mensaje acerca de lo sagrado de la vida,
con el cual podemos celebrarla, juntos.
Acerca de la Instalación
La exposición NEXT proponía en su línea curatorial una reflexión sobre la vulnerabilidad del ser humano ante el ser humano; propone establecer un diálogo con el espectador sobre sensaciones y probabilidades relacionadas con la incertidumbre, el temor y la inseguridad. Mi propuesta es una antítesis a estas premisas impuestas por la inercia de una vida vertiginosa llena de trabajo y compromisos y tan vacía de espacios para reflexionar sobre el valor de la vida.
Mi propuesta consiste en intervenir un árbol de la institución, árbol como símbolo de vida, con 100 Tsunamikas que decorarán, a manera de esferas, al árbol elegido. Como obra de arte efímero, la idea es que, espontáneamente, cada espectador adopte una Tsunamika y se la coloque como pulsera, adoptando de esa forma el compromiso de respeto a la vida que estas muñequitas hindúes representan. La instalación termina cuando las Tsunamikas hayan sido completamente retiradas del árbol.
La moda de las pulseras con causa lleva ya algún tiempo insertada en nuestra sociedad; normalmente el que alguien compre una pulsera con causa (ayuda contra el cáncer, contra el sida, un kilo de ayuda, teletón, ministerios de amor, etc.) implica, además del desembolso económico, el compromiso que se adquiere con la causa que se apoya. Portar una pulsera es, por lo tanto, sinónimo de compromiso con una causa.










¿Cuál es el compromiso al adoptar una Tsunamika?
Primero, ser conscientes acerca de la violencia e inseguridad que sufrimos en la actualidad y que esta es consecuencia de nuestros actos como parte de una sociedad. Es una invitación para reflexionar sobre la responsabilidad que tenemos como seres humanos, como padres, como ciudadanos, como consumidores.
Segundo, el compromiso con el respeto a la vida. Porque todas nuestras crisis que como sociedad estamos sufriendo tiene un mismo punto de partida: la falta de respeto hacia nuestra vida y a la de nuestros semejantes.
Al fin y al cabo, todos sufrimos tsunamis internos que nos hacen, en ocasiones, tocar fondo y cuestionar nuestras convicciones, nuestras creencias, nuestros actos. Tsunamika representa, entonces, esa luz al final del túnel cuando estamos sufriendo una de esas sacudidas existenciales; representa un recordatorio del valor de la vida.
Y bien, todo lo anterior es el texto que acompaña a la ficha técnica de la obra. No pretendo educar a nadie con esta instalación ni mucho menos moralizar con el asunto de la violencia; mi idea primaria es simple: un momento para la reflexión.
Afortunadamente la instalación tuvo mucho éxito, los asistentes a la inauguración conocieron toda esta historia de las Tsunamikas y pudieron llevarse una a casa, espero que sirva para generar ese espacio para la reflexión que propongo.
Aquí les dejo dos ligas con imágenes de la inauguración:
Imágenes Tsunamika-Javier Lara
Imágenes generales de la expo

Para terminar, agradecimientos inmensos a mis alumnos Laiza y Javier que me ayudaron a hacer el montaje de la instalación que yo dirigí a distancia desde DF; a Titina Cantú Sada, directora del Centro Cultural de Arte AC quien me invitó a participar y me apoyó en todo lo que le solicité para la producción de la instalación y, muy especialmente, a Eblyn Josafat, a Upasana Design Studio de la India y a Abril Cigarroa, quienes me involucraron en este mundo de las Tsunamikas y me dieron las facilidades para poder contar con las muñequitas en México.

Saludos


jL

4 comentarios:

Toshibo dijo...

Que onda
Felicidades por la colaborción en la exposición, lo que a mi me tiene indignado es como no avisas que visitas la ciudad para ir por unas cheves jaja, un saludo Javier.

Javier Lara dijo...

Hola Carlos,

sí, qué pena, lamento no haber avisado, de plano estuve lleno de trabajo, sin tiempo para hacer otra cosa; pronto estaré de vuelta y ya estaré avisando por aquí.

saludos

jL

Diana dijo...

Es muy grato saber en que andas, al menos por medio del blog nos podemos enterar. Respecto a lo de tu instalación, lo encuentro muy conmovedor, me da gusto saber que te fué bien. Saludos.

Javier Lara dijo...

Hola Diana,

qué gusto saber de tí y qué bueno que te gustó la instalación de Tsunamika; muchas gracias por los comentarios.

Un abrazo.


jL